1 de agosto de 2015

Adiós a Saza


El pasado 23 de julio falleció en Madrid el actor José Sazatornil, próximo a cumplir 90 años y de quien hace un par de años nos contaba la prensa que había perdido la memoria, esa capacidad sin la que se esfuma nuestro contacto con el mundo. El popular "Saza" había nacido en Barcelona y en mi caso su recuerdo va unido a un viaje en Talgo en el que fui su vecino de asiento a finales del año 1999; se trataba del Talgo que iba de Port Bou a Madrid y al que yo subí en Tarragona. El hombre iba acompañado de su mujer y pude ver su lado más humano cuando comenzó a soltar alguna lagrimilla por causa de la emotiva película que ponían en el vagón, la inolvidable "La vida es bella" de Roberto Benini; tanto la calidad como el argumento del film justificaba la debilidad de Saza, algo que ya reflejé hace unos años en un post:

 http://modestino.blogspot.com.es/2013/07/un-famoso-mojando-la-pestana-en-el-talgo.html.

La otra imagen que me viene inevitablemente a la cabeza cuando veo su foto, con el característico "bigotillo" y su frente ampliamente despejada, es la del personaje de Jaume Canivell, el fabricante catalán de porteros eléctrónicos "quintaesenciado" por Berlanga en "La escopeta nacional", que viaja con su secretaria y amante -una creíble Mónica Randall- a una cacería en una finca madrileña para conseguir colocar su producto entre la alta sociedad madrileña y los políticos de la época: falangistas, tecnócratas y demás. Un film en el que Saza encabeza un reparto compuesto por lo más granado en actores de la época, todos ya desaparecidos: José Luis López Vázquez, Amparo Soler Leal, Luis Escobar, Agustín González, Antonio Ferrandis, Laly Soldevilla, Rafael Alonso,  ... Dudo mucho que hubiera en el panorama nacional -¡y europeo!- un actor más adecuado para encarnar la sufrida figura de Jaume Canivell: " ya lo decía mi padre, ... los viajantes ...".

En el cine destacaron también sus trabajos con Luis García Berlanga en "El verdugo" (1963) y "Todos a la cárcel" (1993); con José Luis Cuerda en "Amanece que no es poco" (1989) y en "La Colmena" (1982). de Mario Camus. No sería justo olvidarse de sus buenos trabajos como actor de reparto en esas comedias españolas tan características de los años 70: "La ciudad no es para mí" (1966), de Pedro Lazaga, "Las que tienen que servir" (1967), de José María Forqué, "Solos los dos" (1968), de Luis Lucia y junto a Marisol y Palomo Linares, "Carola de día, Carola de noche" (1969), de Jaime de Armiñán, "El astronauta" (1970), de Javier Aguirre, "A mí las mujeres ni fu ni fa (1971), de Mariano Ozores y "Me has hecho perder el juicio" (1973), de Juan de Orduña, entre muchas otras. No obstante, el momento cumbre de José Sazatornil llegó cuando en 1988 recibió el Goya al mejor actor de reparto por su papel en "Espérame en el cielo", de Antonio Mercero, cinta en la que encarna a un hilarante "jefe de propaganda nacional" del franquismo que dirige un comando que secuestra a un especialista en ortopedia para ejercer de doble de Franco.

Aun con la etiqueta de actor más bien cómico, Sazatornil era un actor serio y concienzudo; en una entrevista que le hicieron en los años 90 reconocía que debía estudiarse a fondo los papeles que le encomendaban, pues no tenía la buena memoria de otros compañeros. En el obituario de "El País" se recordaba esta afirmación y aquella en la que admitía que nunca había tenido problemas con los directores porque era un actor "obediente, serio y disciplinado". Descanse en paz.

2 comentarios:

Tommy dijo...

Y luego estaba su no menos brillante carrera teatral. Cosechó un grandísimo éxito interpretando a Domenico Soriano, sufrido esposo de Filomena Marturano, en la célebre comedia del mismo título coprotagonizada por Concha Velasco (con la que también compartió cabeza de cartel, esta vez en el cine, en la descacharrante "Cinco tenedores" de Fernando Fernán-Gómez). También le vi sobre las tablas haciendo nada menos que un drama de guerra ("Un día de libertad"), en el que por supuesto aprobaba con nota. Y a pocos, por no decir a nadie, he visto en un escenario interpretar tan bien a Jardiel Poncela (no es especialmente fácil hacerlo bien) como a él haciendo el cartero de "Cuatro corazones con freno y marcha atrás". Por no hablar de un Don Mendo también memorable, aunque ahí no tuve la suerte de verle.

De su carrera en el cine, ¿qué más se puede decir? Siempre brillante, desde los roles más pequeños, como el del prólogo de "La ciudad no es para mí", hasta sus dos protagonistas con Berlanga (¿o era el mismo personaje en dos épocas distintas?, pues "La escopeta nacional" es al franquismo lo que "Todos a la cárcel" al felipismo), sin olvidar ese camarada Sinsoles de la peli de Mercero que le valió el Goya y con el que algunos vimos cumplido nuestro sueño de verle hacer un personaje que podía pasar por el "Martínez el facha" de los comics. Adiós, en fin, a uno de los más grandes.

Modestino dijo...

Si no recuerdo mal Filomena Marturano fue interpretada por Sofía Loren y su esposo, por Mastroianni ... diferentes roles ...

Agradezco que hayas suplido tan bien mis omisiones en teatro. En la tele salió poco ... creo.